Desde Santiago, durante horas de la tarde este jueves, el féretro del carabinero Daniel Palma, asesinado tras una fiscalización en Santiago Centro, llegó hasta la casa de su madre en Rancagua, lugar que la familia escogió para darle el último adiós al funcionario de 33 años, quien deja a un hijo y a su esposa embarazada. Al momento de llegar, fue recibido entre aplausos por parte de los presentes, quienes además entonaron el himno nacional en su honor.