Una cinematográfica maniobra es la que lleva a cabo la NASA con el fin de impactar al asteroide Didymos B: La misión DART buscará cambiar su órbita para que no llegue a la Tierra. Sobre este objeto, Andy Rivkin, que es el investigador principal del proyecto, señaló que tiene el tamaño del monumento de Washington, en Estados Unidos, e indicó que fragmentos de este tipo golpean al planeta cada dos mil años y podrían causar graves daños. Con la realización de esto se comprobaría o refutaría la posibilidad de interferir en la trayectoria que tienen estos elementos. Rodrigo Herrera, astrónomo de la Universidad de Concepción, destacó la importancia de esto, pues señaló que "en el futuro nos podría salvar de la inminente colisión con un asteroide que se encuentra con rumbo hacia nosotros". Si se considera que al año se reciben cerca de 16 mil kilos de fragmentos, esto toma relevancia para proteger el planeta. La misión iniciará el próximo 24 de noviembre.