El refrán dice: "No todo lo que brilla es oro", y un claro ejemplo de ello es un grupo de sujetos que sorteaban costosos autos y lujosas casas para una "rifa". Si bien todo parecía un evento cotidiano y legal, se trataba de nada menos que una banda de narcotraficantes que buscaban lavar dinero. Por si fuera poco, contaban con un abogado que los asesoraba para esta actividad ilegal.