La Policía de Investigaciones (PDI) detuvo a una banda delictual, cuyos integrantes se dedicaban a cometer violentos robos mediante una conocida aplicación de citas. La modalidad consistía en engañar a personas a través de internet, fingiendo conversaciones para concertarlos en un lugar aislado, donde posteriormente las víctimas eran intimidadas para llevarse todas sus pertenencias.