Un vehículo robado quedó incrustado en una casa de Maipú luego de que sus ocupantes protagonizaran un atraco en un servicentro Shell de la misma comuna. Los delincuentes se trasladaban a una alta velocidad, perdiendo el control e impactando el domicilio, ocasionando daños de gran magnitud. La dueña de casa relató que tras el estruendo "se me taparon los oídos y no podía escuchar. Fue demasiado fuerte, como una bomba". Luego del choque, los delincuentes se dieron a la fuga.