Este sábado se disputó la final de la Copa Libertadores de América, que disputaron en el Estadio Maracaná de Río de Janeiro Boca Juniors y Fluminense.
El compromiso se jugó bajo estrictas medidas de seguridad luego de los reiterados incidentes que se produjeron los días previos entre los hinchas de ambos elencos.
En un encuentro cerrado, el primer gol de la jornada llegó a los 36 minutos cuando el argentino Germán Cano se desmarcó en el área y batió a Sergio Romero.
En el complemento los Xeneizes crecieron y con empuje se fueron acercando al arco defendido por el experimentado Fabio. Así llegó la igualdad a los 72’ a través del peruano Luis Advíncula.
De esta manera, el trascendental encuentro terminó 1-1 en los 90’ y se tuvo que ir a la prórroga.
Gol y expulsiones en la prórroga de la final
A los 99’ Kennedy puso en ventaja nuevamente al Flu con un potente remate. El delantero tuvo un eufórico festejo y quedó entre los simpatizantes del elenco de Río de Janeiro. Esto le significó su segunda amarilla y expulsión.
Antes de que se terminara el primer tiempo del alargue, el árbitro colombiano Wilmar Roldán fue llamado por el VAR, donde estaba el chileno Juan Lara. Ahí el juez principal decidió la expulsión de Frank Fabra por agresión.
En el segundo tiempo de la prórroga Boca se fue desesperadamente al ataque y metió en su arco a Fluminense, que puso resistir.
La primera Libertadores de Fluminense
A pesar de ser uno de los clubes más importantes de Río de Janeiro y de Brasil. Fluminense nunca había podido ganar la Copa libertadores, solo tenía una final en 2008, donde cayó en penales ante Liga de Quito.
El equipo brasileño se clasificó al Mundial de Clubes, que se disputará en diciembre en Arabia Saudita y donde también está clasificado en otros equipos, el Manchester City.
