La ganadora de Gran Hermano estuvo ausente casi cuatro meses y cuando intentó reordenar sus asuntos al salir del encierro se enfrascó en un tenso conflicto.
Luego de haberse coronado como la flamante ganadora de la segunda temporada de Gran Hermano, Michelle Carvalho protagonizó un tenso conflicto en medio de un esperado reencuentro.
La modelo brasilera reordenó los asuntos pendientes tras su salida del encierro y fue en busca de su gata, Mika, quien se estaba hospedando en un hotel para mascotas hace tres meses, desde que ingresó a Gran Hermano.
Al arribar al lugar, su querida compañera la reconoció e incluso se acercó a Michelle para que la acariciara, dejando sorprendida a la modelo.
"¡Se acordó, mira!", señaló un sujeto a través de las historias de Instagram de Michelle, sin embargo protagonizó un tenso conflicto con la gata, quien comenzó a gritarle constantemente.
Al respecto, Michelle contestó: "¡¿Qué?! ¡Si yo sólo me fui tres meses!", sin embargo Mika no estuvo de acuerdo con su argumentación y aunque se restregó contra ella e incluso se subió a su espalda, dejó en claro que no está contenta con todo el tiempo separadas.
En esa misma línea, Mika intentó rasguñarla y morderla a lo que Michelle contestó: "Ah, ya" y luego señaló: "¿Quién soy? ¿Ah? ¿Te acuerdas de mí?".
Finalmente, cuando llegó el momento de volver a casa, Michelle creyó que habían arreglado sus conflictos, pero Mika se encontraba jugando en un rascador y le pegó un feroz manotazo que complementó con gritos y rasguños, dejando en claro que nadie la hace enojar sin pagar las consecuencias.