La final de la Champions League es uno de los eventos deportivos más esperados del año, al nivel incluso de la final del Mundial. Este año el choque entre Real Madrid y Liverpool despertó las expectativas de todos los fans por cómo llegaron ambas escuadras al partido definitorio: por un lado, los Blancos hicieron gala de su jerarquía y eliminaron al PSG, al Chelsea y al Manchester City; por otro, los Reds desplegaron su presión alta para dominar y superar a todos sus rivales en la competición.
En un gran partido, el Madrid venció por 1-0 al conjunto inglés con gol de Vinícius Jr. Los hinchas y amantes del fútbol en general no tuvieron reparos con el espectáculo futbolístico. Sin embargo, sí hubo críticas al show musical previo al pitazo inicial, el cual estuvo a cargo de la cantante cubana-estadounidense Camila Cabello.
Uno de los mayores críticos fue Marco Van Basten, una de las leyendas que posee el fútbol neerlandés. No se contuvo al apuntar a la UEFA y su afán por intentar parecerse al Superbowl del fútbol americano. "Nosotros queremos ver futbol, pero se nos obliga a ver el espectáculo de una muchacha random cantando con bailarines coloridos", fustigó.
"La UEFA y la FIFA tratan de hacer dinero hasta con esas cosas en un partido de fútbol. Mantengan estos espectáculos alejados de nosotros, lo que queremos es ver un partido de fútbol", agregó.
Cabello ya se había ganado las críticas de los fans por un tuit que publicó horas después del partido. En él, la cantante señalaba que no podía creer que los hinchas de ambos equipos estuviesen más preocupados de alentar a su equipo que ver su espectáculo, el cual había preparado con mucho amor. Y es que, efectivamente, durante la presentación se puede escuchar a los hinchas de ambos equipos entonando sus cánticos en vez de las canciones de Cabello.
La publicación se llenó de comentarios en su contra, haciéndole entender que esto no era Estados Unidos y que decir algo así era no saber de fútbol. Finalmente, borró el tuit.
