Tenía 14 años y madrugó esa mañana para competir en la Maratón de Santiago, pero un automovilista ebrio lo arrolló mientras esperaba locomoción en una parada de micro. Hoy día Kevin Silva ya tiene 26 años, es ingeniero de profesión y padre de un bebé de cuatro meses. Su historia en el capítulo de hoy Marcas: huellas que cambian vidas.