La pandemia los dejó en una situación agónica, pero se niegan a cerrar. Con tarifas rebajadas y nuevos servicios, los hoteles de Santiago centro intentan sobrevivir tras los duros meses de pandemia en los que tuvieron que superar con ingenio (y deudas) a las adversidades. Aunque, por supuesto, no todos los establecimientos corren la misma suerte. Después de la crisis que vivieron producto de la abrupta y prolongada detención del mercado del turismo, algunos inmuebles, inclusive, ahora están a la venta.