Alrededor de 150 detenidos dejó una marcha convocada por jubilados en Buenos Aires, Argentina. La violenta jornada, a la que se sumaron diversos movimientos políticos e hinchas de equipos de fútbol, terminó con decenas de heridos. Patricia Bullrich, ministra de Seguridad del país trasandino, calificó a los detenidos como "lo peor de la decadencia" y espera que se apliquen penas de hasta 20 años de cárcel.