Este experimento social muestra cómo nos comportamos los chilenos cuando se acerca un desconocido a pedirnos ayuda, y nos solicita que mintamos sobre la situación actual de esta persona.
Por ejemplo, la situación es la siguiente: un supuesto compatriota originario de Iquique vino a la capital a comenzar una nueva vida, tener nuevas amistades y lanzarse con un nuevo trabajo, pero para mandar un mensaje de tranquilidad a su familia, este personaje pide asistencia a gente desconocida para que le manden un saludo a sus parientes y mientan haciéndose pasar por el jefe, o una compañera de trabajo.
Para esto, nuestro periodista fue a pleno Paseo Ahumada para ver cómo reaccionaba la gente, y siendo honestos, la respuesta fue bastante positiva, ya que las personas con mucha voluntad y carisma se la jugaron por salvarle el pellejo a nuestro actor-periodista y sin mayores problemas, se hicieron pasar hasta por el jefe.
