Olga contó su historia en La Mañana, relatando su experiencia en octavo básico.
Jueves 1 de diciembre de 2016 | 11:30
A sus 81 años, revisa sus cuadernos y notas, es la historia de Olga Flores, quien cumplió un sueño que en su infancia le fue arrebatado. Su padre le dijo a temprana edad que no siguiera estudiando y se enfocara en ser dueña de casa.
Ahora que sus hijos están adultos, decidió retomar los estudios y juró que no se iba a morir antes de terminar su octavo básico.
En el colegio dice sentirse como en casa, ya que le gusta ir aprendiendo cada vez más y establecer relaciones de amistad con sus compañeros.
También mostró su preparación para la gran licenciatura, donde fue ovacionada al recibir su certificado de octavo básico, demostrando que nunca es tarde para aprender. Ahora Olga va por su próxima meta, sacar el cuarto medio.