La modelo aseguró que no sabía que el futbolista estaba casado y que fue advertida de la situación por una amiga cuando ya llevaban varios meses de relación. Tiempo después fue increpada por su esposa.
Sábado 11 de mayo de 2024 | 18:39
Este viernes, Adriana Barrientos reveló una anécdota amorosa que impactó a sus seguidores, debido a que admitió haber estado en una relación amorosa formal con el histórico ex jugador de la Universidad de Chile, Diego Rivarola, cuando él aún estaba casado.
La modelo aseguró que ella no sabía del estado civil del deportista argentino y que incluso fue increpada por teléfono por su entonces esposa, Laura Grassi.
Barrientos relató los hechos en su programa Zona de Estrellas: "Corría el año 2004 y yo trabajaba como modelo de alta costura y en uno de los desfiles habían futbolistas, me tocó desfilar con Diego Rivarola. Por supuesto me pidió el teléfono, era bien estupendo, yo tenía 24 años", aseguró.
En esa misma línea, agregó: "Me pasa dos entradas, voy en compañía de alguien. Sentada en el lugar donde se sentaban todas las mujeres de futbolistas, el hombre mete un gol, se agarra de la reja y me apunta con el dedo, un gol dedicado a mí".
La confesión causó impacto en sus compañeros de panel, por lo que Adriana comentó: "El segundo gol lo mete conmigo porque me dice: 'Te dediqué un gol ¿Vos querés ser mi polola?(sic)' Ahí fue el segundo gol ¿Qué crees que le iba a decir yo a Diego Rivarola?".
La "Leona" Barrientos aseguró que fue "un pololeo maravilloso de cuatro meses" hasta que una amiga le notifica que Diego Rivarola se encontraba casado: "Un día me llaman por teléfono de la casa, contesto y me dicen: 'Hola ¿Tú eres Adriana? Estás con mi marido'".
La confirmación de los hechos causó impacto en Barrientos, quien le respondió afirmativamente y luego cortó la llamada sin entrar en más detalles, sin embargo, increpó al ex jugador de la U. de Chile.
"Tú estás casado y me estás exponiendo a mí a algo de este tipo. Agarre sus cositas y esto se terminó", le dijo la modelo, quien aseguró que Rivarola intentó justificar su actuar, sin embargo Barrientos no cedió y la relación se terminó para siempre.