En el tercer día de juicio, Dani Alves respondió a las preguntas que hizo su abogada y reconoció haber tenido intimidad con la denunciante.
Miércoles 7 de febrero de 2024 | 15:39
Este miércoles se llevó a cabo la esperada declaración de Dani Alves, futbolista brasileño que está en pleno juicio tras ser acusado de agresión sexual.
En la Audiencia Provincial de Barcelona, el jugador entregó su versión de los hechos ocurridos en diciembre del 2022, lo que lo mantuvo por varios meses en prisión preventiva.
Luego de que declaran la esposa del ex seleccionado, la presunta víctima (a puertas cerradas) y un grupo de doctores, llegó el turno del imputado.
Alves, que arriesga hasta 9 años de cárcel, contestó solamente las preguntas que hizo su abogada, Inés Guardiola, explicando que todo se originó luego de juntarse con dos amigos que no veía hace mucho tiempo.
Tras almorzar y pasar la tarde juntos, el multicampeón reconoció que se fueron a la discoteque Sutton y que tenía alcohol en su cuerpo. "Bebí dos botellas de vino y alguna copa de whisky", comentó.
El defensa señaló que conocieron a un grupo de mujeres con las que bailaron. "No estaban incómodas, para nada. Llegaron, nos empezaron a saludar", dijo.
"Empezó una conversación, nos movíamos, hablamos unos con otros. Soy una persona muy cercana, pero con respeto", agregó.
En ese instante, el brasileño se quebró y aseguró que tuvo intimidad con la denuncia, recalcando que "me dijo que sí para ir al baño, no tuve que insistir" y que no la forzó.
Luego de entregar detalles sobre lo que ocurrió entre ambos, Alves rompió en llanto y apuntó que "se me vino el mundo encima" una vez que fue acusado de agresión sexual.
Finalmente, confesó que está prácticamente arruinado económicamente porque "me habían bloqueado la cuenta en Brasil y me habían roto todos los contratos".